lunes, 4 de abril de 2011

Educación y Software Libre


Para explicarle a unos amigos, escribí unas líneas sobre qué es el software libre, podría mandarles un montón de links de internet y sería un enorme mareo, así que voy a tratar de ser conciso, por tanto voy a ser escaso, selectivo y posiblemente mezquino e injusto con muchas posibilidades del SL, por eso si tienen dudas, sumen sus comentarios y las aclaro dentro de mis limitaciones.

El software libre no se refiere a un tipo de tecnología, sino que es un movimiento tecnológico-social que promueve libertades digitales para los usuarios de software (que somos todos, cada vez mas y para más cosas) de modo de no quedar atrapados de las restricciones que imponen muchos fabricantes de software que restringen estas libertades, principalmente las libertades de compartir un programa, de ver como está hecho, de modificarlo y de compartir estas modificaciones.

El software libre es una alternativa LEGAL al software no-libre (privativo, propietario), que se sustenta en la decisión de su/s autor/es que decidimos compartir nuestras creaciones con todo/as como forma de construir soluciones colaborativas, más flexibles, más eficientes, mas económicas, más innovadoras, más solidarias, más igualitarias, etc.
Muchas administraciones publicas se han decidió por la adopción de Software Libre como Política de Estado, motivados no solo por razones de costo, sino por razones de soberanía tecnológica (ser dueños de los programas que usan, tener independencia para elegir proveedores o hacer desarrollos propios desde el Estado, etc.) y de desarrollo local (sustitución de importación de licencias del exterior por servicios de profesionales y empresas locales, innovación y aprendizaje local, generación de empleos de altísimo valor agregado sin más costos que computadoras, redes y materia gris, ya que las herramientas son libremente accesibles). En la región han adoptado SL como política de Estado Brasil, Venezuela, Ecuador y Paraguay. En la Argentina hay numerosos ejemplos  de uso por parte de organismos públicos a instancias principalmente de sus áreas técnicas, sin esta visión política, aunque el año pasado el Jefe de Gabinete enuncio que “El Software Libre es una Política de estado en Argentina” en la apertura de la 1ra Conferencia Internacional de Software Libre
http://www.iprofesional.com/notas/103929-El-software-libre-sumo-a-Anibal-Fernandez-como-su-impulsor-dentro-del-Estado.html

La Universidad Nacional de La Plata es una de las pioneras en Argentina y dedica una página sobre el tema donde comentan sus actividades y noticias de interés relacionadas http://sl.linti.unlp.edu.ar/
El FLISOL, festival latinoamericano de instalación de SL que se organiza desde 2005, ha ido creciendo año tras año, en 2010 hubo más de 300 ciudades en el continente que hicieron este evento simultáneo para difundir e interconectar a los interesados (y a los que podrían estarlo!). La idea del sincronismo latinoamericano ha logrado una gran atención de la prensa en ediciones anteriores.

Tras la idea del software libre hay una filosofía/ideología, basado en la libertad de conocimiento, la solidaridad y la igualdad, y la construcción colaborativa, que dio lugar o se relaciono con otros movimientos similares, creando cosas como la wikipedia (una enciclopedia libre y abierta hecha por sus propios lectores/autores/usuarios) y dando muchas de las herramientas para construir las redes sociales (tanto facebook como twitter están hechas con lenguajes de software libre) aunque suele haber una visión critica de esos espacios donde la información no es de los usuarios/autores sino que queda al libre arbitrio de la empresa que los colecciona y centraliza (e incluso comercializa, censura o espía, como en conocidos casos de relaciones entre esas empresas y el depto de estado norteamericano).
Se podría decir que el Movimiento por el Software Libre es un movimiento político surgido en sintonía con la aparición de internet y las redes abiertas, que promueve la idea de la libertad de los usuarios, la apropiación social de las tecnologías y el desprecio por los abusos monopólicos en cuestiones tecnológicas.

Autor: Martín Olivera